De antílopes y leones.
- Indio «Locomotora Veloz»
- 14 may 2015
- 4 Min. de lectura
Antes de nada, que nadie se dé por aludido por lo que voy a decir. Pero no solamente nadie se debe dar por aludido, también el resto de los miembros del club –que se den todos por aludidos, porras–.
Señores, basta ya de lloriquear en las salidas y días previos de las carreras. Cada domingo muchos que lleváis las camisetas VERDE BIKILA estáis con la misma cantinela:
Que si he entrenado poco,
Que si me duele el poplíteo y el astrágalo,
Que si ayer tuve fiebre, constipado, anginas, catarro, …
Que esta semana he dormido poco y voy mal,
Que la cena me ha sentado mal y los triglicéridos e hidrocarburos no los he terminado de asimilar,
Que la mezcla de ácidos grasos insaturados, monoinsaturados y poliinsaturados del bistec que me comí ayer no fue la correcta,
Que el pectíneo no me gira lo suficiente,
Que si el zumo del desayuno me da gases,
Que si el trabajo,
Que me he hecho una rozadura y no puedo entrar lo que yo quisiera de metatarso y voy mal,
Etcétera.
Si alguien no me cree que mire los registros de Facebook, Wassup y demás redes sociales.
¡Basta ya señores!, que somos BIKILAS (con mayúsculas) y los BIKILAS (con mayúsculas de nuevo) no muestran debilidad. Os imagináis un león antes de salir a cazar al antílope diciéndole que tiene molestias en el tendón de Aquiles y al pisar de metatarso le duele, además, el rotuliano. Coño, el antílope se partiría de la risa y diría: «éste hoy va a comer una sopa de ajetes, porque al menda no lo coge ni de coña».

¡No, hombre no! Pongamos por caso ahora dos boxeadores en un ring justo antes de empezar la pelea, uno mirándole con cara de mala ost… (por ejemplo a Mike Tyson), apretando la mandíbula y sacando todas la venas del cuerpo y de los trapecios (para que parezca que aún tiene menos cuello) y en frente estuviese Evander Holyfield y le dijese: «macho, no sé, es que ayer dormí mal y el batido de proteinas no me lo acabé entero, y no estoy muy allá, voy a salir tranquilo y a ver qué pasa». ¡Que ¿qué pasa?!¿Qué pensaría el Mike Tyson? Si ya se lo iba a comer de todos modos, ahora no le duraría ni un asalto, se tiraría a la yugular cual vampiro hambriento y por dentro se descojonaría.
Pues esa es la imagen que uno muestra con esos comentarios pesimistas y de perdedor. El león, aunque esté herido, ruge, enseña las garras y los colmillos, y con eso ya lo tiene todo medio ganado, porque el antílope se queda acojonado, bloqueado, temeroso. Con eso ya se ha ganado la mitad de la batalla.
Si uno no se lo cree y se lo dice asimismo, está derrotado, y esa no es una actitud BIKILA.
Cuando uno se pone la camiseta VERDE BIKILA debe transformarse en algo similar al «Increíble HULK» (o «la Masa» para los que tenéis más de 35 años –con Lou Ferrigno–), es decir, en un ser indestructible.

A este no le hace falta la camiseta
Esa es la actitud VERDE BIKILA. Solo así os mirarán con respeto y temor. Así que las frasecitas de antes yo podéis ir cambiándolas por otras del tipo:
El jueves hice doce miles a tres «pelao» con uno de recuperación y como si nada.
Estoy que me salgo.
He llegado en mi mejor pico de forma.
Hoy bato mi marca.
«Cuidadín, cuidadín» conmigo.
Etcétera (bueno esto no se debe decir. ¿Os imagináis? Que digáis «etcétera» pensarán que estáis majaras –que alguno lo está-)
Pero esto se debe decir con cautela, sin llegar al nivel de fantasma, hay que ser muy sutil en esto, y en esa sutileza está la diferencia entre el fantasma y el tío o tía que acojona. Pero ante la duda, más vale ser fantasma que «cobardica».
Y dicho esto y una vez clara cuál es la ACTITUD VERDE BIKILA (y que los del club postcarrera del Sacacorchos no me vengan ahora con la actitud verde Heineken), os retamos a un nuevo concurso de fotografía (aunque también vale un dibujo, Photoshop, o cualquier cosa con la que se pueda crear una imagen).
El tema es «Captura el Espíritu Bikila». Para ello nos tenéis que mandar una foto, o cualquier tipo de imagen con una frase (o bien la frase ya puesta en la imagen) que refleje el Espíritu Bikila.

Por ejemplo: uno hace una foto corriendo y adelantando a un león del África subsahariana al que previamente le ha tatuado «BIKILA GRANADA» en el lomo, y le pone el letrero de «cuidado por tu izquierda, que pasa un Bikila».
Otro (ejemplo): uno se hace una foto y la retoca con Photoshop, corriendo por el agua, entrando de metatarso, con un modelo minimalista (digamos una chancleta playera de una tira amarillo limón del «chino» de la esquina, «Bazar too a un eulo») con la estela de agua que levanta en forma del logo BIKILA, y con la frase sobreimpresa de «cuidado con las orejas, que las voy mojando». Y hasta aquí puedo contar, el resto os lo imagináis vosotros.
Os dejamos el enlace a las bases del concurso y esperamos vuestra participación masiva.

PD: Os hemos dejado en la página de inicio una serie de frases de motivación, para aquellos que aún les cueste creerse que son BIKILAS. Como veis, en esto de la motivación suelen ser los entrenadores de deportes de equipos los mejores. Así que aplicaros el cuento BIKILAS. ¡Auh, auh, auh!
Comments